Thursday, July 31, 2008

Radio Blog 92, ft. Evangelicals

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Evangelicals son cuatro manes de Oklahoma, hogar de los Flaming Lips. Debe haber algo flotando en el aire por allá, porque aunque Evangelicals no están tan chiflados como The Flaming Lips, un poco de locura, buen humor y ganas de contar historias, también contagia su música. Y tan normales que se ven:


Hace dos años Evangelicals lanzó un álbum que pasó sin pena y sin gran gloria, So Gone, pero que al menos logró que su nombre fuera recordado dos años después, para cuando lanzaran uno de los mejores álbumes de lo que va este año (según yo), The Evening Descends:
  • Evangelicals - The Evening Descends (2008): Yo estimo mucho Pitchfork. Pocas veces me decepcionan sus recomendaciones, pero la gran mayoría de veces me satisfacen y este álbum es una de estas últimas. Cuando recomendaron a comienzos del año un álbum más de Evangelicals, después de haber recomendado dos años antes el primero, So Gone, tuve que sacarles el tiempo y lo escuché. Y no he parado de hacerlo. The Evening Descends es un álbum de concepto, como los que más me gustan, con absolutamente ningún momento flojo o de relleno, y que después de ponerlo demasiadas veces sigue envejeciendo muy bien. Parece un cuento de brujas, tanto oscuro como chistoso. Léaselo.

  • Evangelicals - So Gone (2006): Yo estoy tan encantado con el segundo álbum que el primero lo he escuchado poco desde que me lo compré la primera vez que los vi en vivo. La pasé bien escuchándolo, pero no me dieron ganas de repetirlo así como tanto lo hago con The Evening Descends. La verdad se muy poco de este álbum, así que mas bien les pongo aquí unas palabras del que me introdujo a ellos:
    I'm pretty sure Evangelicals aren't actual evangelicals, but their debut album seems bound to blind faith, a fearless lack of direction or discretion (...) The tracks on So Gone don't rock and roll, twist and shout, or perform any of the standard motor functions we expect of pop songs. Instead, they accelerate, crash, reboot, reformat. So Gone is spacious and expansive, but also oddly tactile-- the sonic details aren't purposefully introduced, they just intrude when they feel like it.

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