Después de ver gratis a Kings of Leon (porque no les pagaría la boleta) y comernos una hamburguesa de primera en Corner Bistro, otro chuzo de NYC que frecuento por lo bueno, bonito y barato, con mi amigo Mr. Mustard nos fuimos a disfrutar la atmosfera que Beach House y The Clientele nos tenían preparada en el Bowery Ballroom.
Fué nuestra segunda vez viendo a Beach House, y nuevamente, Victoria y Alex, sus únicos dos integrantes, nos calentaron los oidos lo suficiente con esos teclados y reverb, y esa guitarra que no suena como guitarra. Esta vez quedamos particularmente enamorados de Victoria... no se que nos distrajo la vez pasada, pero anoche fué complicado quitarle los ojos de encima.
Beach House todavía tiene un sólo álbum, así que su repertorio fué basicamente las mejores de ese disco, titulado también Beach House, con un cuarteto de canciones nuevas. Lo nuevo no fué particularmente espectacular como para que se me quedara en la cabeza, pero igual, como ya les dije, esta vez la atención estuvo dedicada a admirar la belleza, así que perdonados.
Hablando de belleza, anoche volví a ver a la excelente nueva adquisición de The Clientele, Mel Draisey, vestida de blanco... viéndose aún más angelical que la vez pasada que los vi. Los protagonistas de la noche, The Clientele, salieron y de una comenzaron con la excelente Since K Got Over Me, la canción que abre su excelentísimo Strange Geometry. Buen comienzo.
Strange Geometry y God Save the Clientele, los dos últimos albums de esta banda, son al final de cuentas bastante similares. A veces, con las canciones menos obvias, me costaba trabajo recordar bien cada canción a qué álbum pertenecía. En cualquier caso, todas y absolutamente todas las canciones que la clientela tocó anoche sonaron en su punto máximo. Seriously, God Save the Clientele!
Hubo un trío de detalles que no se me van a olvidar de anoche. Notamos que Alasdair MacLean, el líder de la banda, se pone uñas postizas, pero sólo en una mano, Mel, la monaza, apenas tiene 24 años, y mis dos canciones favoritas de God Save The Clientele (Bookshop Casanova y Dreams of Leaving) parece que a ellos también les suenan de maravilla porque me las tocaron una después de la otra. Con respecto a Alasdair, no es que al man le guste como se ve, sino que es parte de su técnica para tocar guitarra... go figure! MacLean no toca la guitarra de manera suave únicamente... anoche nos tocó una canción en dónde azotó esa guitarra con fuerza, con riesgo de perder sus uñas (de hecho perdió una, pero en otro momento), recordándome la mejor banda que conozco haciéndolo, Yo La Tengo.
The Clientele, mi Camera Obscura del 2007.
[Album: The Clientele - God Save the Clientele]
[Video: Beach House - Master of None]
Fué nuestra segunda vez viendo a Beach House, y nuevamente, Victoria y Alex, sus únicos dos integrantes, nos calentaron los oidos lo suficiente con esos teclados y reverb, y esa guitarra que no suena como guitarra. Esta vez quedamos particularmente enamorados de Victoria... no se que nos distrajo la vez pasada, pero anoche fué complicado quitarle los ojos de encima.
Beach House todavía tiene un sólo álbum, así que su repertorio fué basicamente las mejores de ese disco, titulado también Beach House, con un cuarteto de canciones nuevas. Lo nuevo no fué particularmente espectacular como para que se me quedara en la cabeza, pero igual, como ya les dije, esta vez la atención estuvo dedicada a admirar la belleza, así que perdonados.
Hablando de belleza, anoche volví a ver a la excelente nueva adquisición de The Clientele, Mel Draisey, vestida de blanco... viéndose aún más angelical que la vez pasada que los vi. Los protagonistas de la noche, The Clientele, salieron y de una comenzaron con la excelente Since K Got Over Me, la canción que abre su excelentísimo Strange Geometry. Buen comienzo.
Strange Geometry y God Save the Clientele, los dos últimos albums de esta banda, son al final de cuentas bastante similares. A veces, con las canciones menos obvias, me costaba trabajo recordar bien cada canción a qué álbum pertenecía. En cualquier caso, todas y absolutamente todas las canciones que la clientela tocó anoche sonaron en su punto máximo. Seriously, God Save the Clientele!
Hubo un trío de detalles que no se me van a olvidar de anoche. Notamos que Alasdair MacLean, el líder de la banda, se pone uñas postizas, pero sólo en una mano, Mel, la monaza, apenas tiene 24 años, y mis dos canciones favoritas de God Save The Clientele (Bookshop Casanova y Dreams of Leaving) parece que a ellos también les suenan de maravilla porque me las tocaron una después de la otra. Con respecto a Alasdair, no es que al man le guste como se ve, sino que es parte de su técnica para tocar guitarra... go figure! MacLean no toca la guitarra de manera suave únicamente... anoche nos tocó una canción en dónde azotó esa guitarra con fuerza, con riesgo de perder sus uñas (de hecho perdió una, pero en otro momento), recordándome la mejor banda que conozco haciéndolo, Yo La Tengo.
The Clientele, mi Camera Obscura del 2007.
[Album: The Clientele - God Save the Clientele]
[Video: Beach House - Master of None]
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